¿Cómo conociste el proyecto?
Lo conocí a través de páginas web de voluntariado. Lo que me llevó a buscar un voluntariado fue la motivación para ayudar a los demás, poder compartir buenos momentos con otras personas, y además, crecer a nivel personal. Tengo que decir que me sorprendió gratamente desde el primer momento.
¿Piensas que el fútbol puede ayudar a las personas a ir adelante?
Pienso que cualquier deporte puede ayudar a sentirse mejor y, en consecuencia, poder afrontar las diferentes situaciones que se nos presentan. El fútbol, además, al ser un deporte de equipo, es ideal, ya que se trabajan habilidades sociales, trabajo en equipo y hace que uno no se sienta tan solo en momentos difíciles.
¿Qué es lo que más te gusta de los entrenamientos?
Me gusta el compañerismo y la implicación que hay. Parece como si, en este momento, no hubiera nada más que lo que está pasando en el campo.
¿Y algo que te haya sorprendido?
Un poco ligado a lo que ya he dicho, la alegría y ganas de seguir adelante que tienen los chicos, a pesar de las duras circunstancias por las que han pasado y pasan.
Mourad y Aitor un día de partido de la Liga CEEB (2019)
¿Cuál sería el momento más bonito que has vivido dentro del proyecto?
Es difícil decir uno de concreto, desde el principio me he sentido muy bien acogido por todos. Es muy bonito, por ejemplo, cuando los chicos vienen, te saludan y te hacen alguna bromita. También fue un momento muy especial cuando fuimos a ver la exposición de arte todos juntos. Si tuviera que decir uno, sería la semana pasada, cuando tuve la oportunidad de preparar y co-dirigir uno de los entrenamientos con la compañera Michi y Joan y ver qué bien se lo pasaban los chicos. Por otro lado, me aventuro a decir que el torneo de este fin de semana, el Enfutbola’t, seguramente estará también en la lista de los mejores momentos. ¡Qué ganas!
Tú que eres portero, ¿chutan fuerte los chicos?
La verdad es que tienen unas condiciones físicas increíbles, ¡¡me hacen sudar de verdad !!
¿Qué es lo más difícil de ser portero?
Bueno, es una posición comprometida y con mucha responsabilidad. A veces es duro, sobre todo si tienes baja tolerancia a la frustración, pero cuando aceptas que todos cometemos errores y que lo hacemos para pasarlo bien, todo cambia.